“Las mujeres aportamos la calidad de nuestras relaciones a las organizaciones”
Con motivo del Día Internacional de la Mujer, Intcomex Chile reunió a las mujeres tecnológicas en un ameno encuentro para conmemorar esta fecha tan especial, como es costumbre desde que se hizo esta actividad por primera vez en 2016.
En este encuentro online, Paulette Favre, Service Lead Distribución en Microsoft, se refirió a las oportunidades de negocio que ofrece Microsoft Office; y Marcela Berton, Product Manager Microsoft en Intcomex, explicó los beneficios pertenecer al Club de Partners.
Como invitada especial, participó Tatiana Camps, Directora de Alago y autora del libro “Liderar desde lo femenino”, quien brindó una charla alusiva a la importancia de las mujeres en el mercado laboral.
“Esta fecha es oportuna para conmemorar las conquistas que hemos conseguido las mujeres en los derechos laborales. En este camino se perdieron vidas, otras perdieron su empleo, otras cayeron presas… Tampoco se nos fueron dados el derecho a ser ciudadanas, a votar, a estudiar, a tener autoridad sobre nuestros hijos. Son derechos que tuvimos que ganarnos”, señaló Camps, ingeniera civil, con un magister en biología cultural y que también se dedica a la consultoría organizacional.
Lee aquí: Las tecnologías digitales, una oportunidad de desarrollo para las mujeres
Una de las preguntas que ha buscado responder Camps en sus investigaciones sobre liderazgo femenino es si las mujeres poseen cualidades particulares que pueden traducirse en valor para las organizaciones. Con ello busca comprender e identificar aquellos rasgos que definen el estilo de conducción de las mujeres y que representan activos valiosos para las organizaciones y dinámicas de trabajo.
“Mi meta es generar un entendimiento sistémico sobre las cualidades de liderazgo de las mujeres, con dos objetivos: reconocerlas y ponerlas en valor”, indicó Camps. “Históricamente, las diferencias se han usado para discriminar y, las mujeres, hemos tendido a igualarnos a lo establecido, que es lo masculino. Esto nos dificulta reconocer nuestras propias habilidades, porque son distintas”.
“Sin embargo, a lo largo de esta investigación, he recogido cientos de casos y experiencias que demuestran el enorme potencial que representa para cualquier sociedad el que las mujeres participen activamente en todos los espacios de toma de decisión, tanto en la organización social como en el poder”.
En la charla con las mujeres tecnológicas se destacó una investigación del Fondo Monetario Internacional en 2500 empresas europeas, la cual concluyó que las compañías que incorporan a mujeres directoras o gerentes mejoran su valor financiero y el de sus acciones en la Bolsa.
“Claro está, el liderazgo no tiene que ver con el género, sino en cómo nos organizamos como sociedad. Venimos de tradiciones religiosas que colocan al hombre como la cabeza de la especie humana. Y toda la creación fue puesta a su servicio. Es una concepción jerárquica, autoritaria, dominante… que nos ha llevado a diversas crisis. Así, necesitamos un entendimiento sistémico de los seres que habitamos este planeta”, sostuvo la autora del libro “Liderar desde lo femenino”.
Entre las conclusiones que compartió Camps en el evento virtual es que “cuando las mujeres nos incorporamos a espacios de trabajo, astutamente nos adaptamos a un sistema que valora lo masculino, adquirimos esas habilidades de los hombres, y dejamos guardadas en un cajón las habilidades que podíamos haber traído”.
“Esto es negarse a sí mismas, genera dolor y, en algunos casos, enfermedad. Es recién cuando esas mujeres están seguras, en una posición de liderazgo y autoridad cuando se atreven a conectarse con sus propias habilidades. Me acuerdo de una de ellas que me dijo ‘me saqué la camisa de hombre’ u otra que señaló ‘no quería seguir siendo un hombre para hacer mi trabajo’”.
También te puede gustar: Las mujeres y el gaming, amor a primera vista
En este sentido, el objetivo de Camps es que en las empresas y en la sociedad en general se valore cada vez más las genuinas habilidades de liderazgo de las mujeres, entre las cuales destaca:
- Conocer a cada una de las personas con las que trabajan: sus intereses, historias, familias, talentos, preocupaciones.
- Se interesan en que el espacio de trabajo sea agradable para todos, que esté ordenado, sea cómodo, acogedor, y que cuente con todas las herramientas necesarias.
- Están abiertas a escuchar sugerencias y aceptan que en sus equipos haya personas que conozcan más de un tema que ellas.
- Están dispuestas a aceptar errores.
- Se preocupan por las implicaciones de las decisiones que toman.
En el cierre de su intervención, Camps destacó que estas habilidades generan un impacto positivo en las empresas y favorecen la gestión de los estados de ánimo, la capacidad de visualizar oportunidades y la habilidad de negocios relacionada con la sostenibilidad.
“Estas habilidades femeninas tienen que ver con cómo las mujeres nos relacionamos. En lenguaje de negocios, el valor que aportamos las mujeres a las organizaciones es la calidad de nuestras relaciones. Es el genuino interés que tenemos por el otro, y que no es un interés transaccional, sino que además de pensar en el negocio, también nos interesamos realmente por las personas”, concluyó. “Esto genera un gran cambio en la dinámica emocional, en las relaciones en las organizaciones. Y esto, a su vez, produce innovación, flexibilidad, rapidez, agilidad, mejor clima laboral y mayor desarrollo de talentos”.
AUTOR:
JOSÉ MANUEL VALLADARES
PR Executive
[email protected]