Recientemente, dos noticias impactaron el sector de la impresión. Por una parte, un equipo de ingenieros de la Universidad de Monash, en Australia, mostró un estudio en el que las técnicas de impresión 3D avanzadas podían ser usadas para desarrollar una aleación de titanio comercial ultrarresistente, lo cual podría contribuir notablemente a mejorar los proyectos llevados a cabo en la industria biomédica, así como también en la energética, de defensa, aeroespacial y espacial. Asimismo, en Barcelona, España, se construyó un edificio impreso 3D, dentro de un proyecto en fase de ensayo, que representa un gran paso en el rumbo que podría tomar la construcción en un futuro cercano con el objetivo de abordar los desafíos sociales y medioambientales.
La impresión 3D está en auge y en los últimos años ha sido implementada en diferentes áreas como la salud, donde se ha visto las capacidades de esta tecnología para imprimir implantes dentales y prótesis de huesos.
“Esta es una categoría nueva para el mercado, aún no se puede encontrar en la mayoría de las tiendas, pero se espera que el negocio crezca a un ritmo muy acelerado en los próximos dos o tres años y que genere aproximadamente 40 mil millones de dólares en todo el mundo”, señala Michael Icaza, Director Comercial para las Américas de XYZ Printing.
Visita: La terapia percusiva aplica la tecnología para la mejoría de la salud
Para todos los gustos
También conocida como fabricación aditiva, la impresión 3D es un conjunto de procesos que producen objetos a través de la adición de material en capas que corresponden a las sucesivas secciones transversales de un modelo 3D.
Son múltiples las ventajas que ofrece esta tecnología y que superan los procesos tradiciones. En primer lugar, agiliza los procesos al permitir la creación de nuevos diseños, probarlos y modificarlos hasta llegar al producto deseado. Otros beneficios son:
- Reducción de plazos.
- Ahorro de costos.
- Disminución de residuos.
- Personalización de piezas.
- Reducción de peso.
Entre los materiales más utilizados en la fabricación, los más comunes son plásticos y aleaciones de metal, pero hoy en día se puede emplear casi cualquier elemento, como hormigón o hasta tejido vivo.
“Actualmente, existen impresoras 3D para todos los sectores: desde niños pasando por un consumidor semiprofesional hasta las áreas profesional, comercial e industrial”, agrega Michael Icaza.
De acuerdo con el portal Somos Maker, algunos de los usos prácticos de esta tecnología son:
- Prótesis de miembros.
- Diseño de maquetas.
- Piezas mecánicas
- Diseño de joyería.
- Objetos comunes.
- Creación de ropa a la medida.
- Diseño de armas de fuego.
- Creación de prototipos.
- Accesorios para teléfonos.
- Piezas para fabricación de aviones.
En este video se muestra con detalle el funcionamiento de una impresora 3D:
AUTOR:
JOSÉ MANUEL VALLADARES
PR Executive
jose.valladares@intcomex.com
