El cableado estructurado es indispensable en los edificios inteligentes
Con información de: https://www.cadlan.com/noticias/todo-lo-que-debes-saber-sobre-el-cableado-estructurado/
El cableado estructurado es una infraestructura de red inteligente que permite, de modo estandarizado, gestionar y utilizar la conectividad de un edificio. Por esto, se ha convertido en un elemento indispensable para responder a los requerimientos tecnológicos de las instalaciones cada vez más inteligentes.
Hoy en día, es fundamental contar con sistemas de cableado confiables y que cumplan con las necesidades de la industria, ya que el 70% de los problemas asociados a las redes, surgen de los fallos con el cableado y los nodos de red. Estas dificultades pueden ser:
– Intermitencia.
– Tiempos de respuesta.
– Bloqueo de ciertas aplicaciones.
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Los principales elementos del cableado estructurado son:
– Cableado horizontal: es el sistema de distribución que se distribuye horizontalmente entre el suelo y el techo. Es el que contiene el mayor número de cables individuales en toda la instalación.
– Cableado vertical: es el que provee la conexión entre los diferentes pisos de un edificio, estableciendo los medios de transmisión, puntos principales e intermedios de conexión cruzada y terminaciones mecánicas necesarias.
– Cuarto de comunicaciones: es la sala en la cual se ubican y centralizan todas las partes del sistema de telecomunicaciones, entre las que están cables, accesorios de conexión, dispositivos de protección y demás equipos necesarios para conectar el edificio a los servicios externos.
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Entre los beneficios del cableado estructurado para las empresas están:
– Fácil mantenimiento: es un sistema integrado y uniforme que solo requiere una sencilla supervisión por parte de los técnicos especializados del soporte.
– Integración de aplicaciones: facilita el uso de un único medio de distribución para los cables que habilitan las señales.
– Conectividad: provee eficacia en la transmisión de información de una forma mucho más simple.
– Capacidad de ampliación: permite realizar ampliaciones en su estructura sin afectar el rendimiento, así como cuando se necesite realizar traslados.
– Rentabilidad: la mayor inversión se realiza en la instalación inicial, ya que posteriormente no implica un gran gasto adicional para mantener su funcionamiento.
– Velocidad de transmisión de datos: la fibra óptica favorece la rapidez del sistema, lo que aumenta la eficiencia y la productividad de las empresas.
– Administración sencilla: es de fácil gestión por parte de los empleados de la empresa, y en caso de traslado, solo se debe redireccionar la conexión para garantizar el funcionamiento de la estación de red.
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